(Caracas 19/11/2017. Civilis DDHH) El éxodo y las migraciones causadas por la necesidad de ayuda, la persecución y la desestructuración socioeconómica de un país es una las consecuencias del impacto de una emergencia humanitaria compleja como la que atraviesa el país, donde hasta el 2015, según cifras de la Organización Internacional para la Migración (OIM), habían salido de Venezuela 606 mil 281 personas. Los grandes éxodos, principalmente de personas en edad productiva, genera severas consecuencias socio económicas en todo país, pero también familiares e individuales que muchas veces pasan desapercibidas y es por ello que Luis Francisco Cabezas, coordinador general de la Asociación Civil Convite AC, lo viene analizando a través de un monitoreo sobre la situación de los adultos mayores en el contexto de emergencia, y los hallazgos son más que desalentadores “los adultos mayores se están quedando solos, deprimidos y vulnerables a la delincuencia, producto de esa misma soledad”.

Si la población en edad productiva está abandonando del país, ¿qué está pasando con los padres y abuelos?

El problema fundamental es que los adultos mayores no están migrando, es decir se quedan en Venezuela, porque muchas veces sus familiares se van sin un empleo fijo, entonces llevarse a una persona adicional es una boca más que alimentar, es un cuarto más, es un cumulo de cosas, que para alguien que se va a probar fortuna, pues es difícil. Adicionalmente, los adultos mayores no son personas que estén dispuestas a migrar, se quedan más bien cuidando la casa y eso los hace muy vulnerables.

¿Vulnerables a qué?

Recientemente se ha visto una victimización de las personas mayores, nosotros recientemente contabilizamos 426 muertes de adultos mayores de las que 280 fueron por asesinato y en donde casi un 40% de esas muertes ocurrieron en sus casas, eso quiere decir que los adultos mayores se están convirtiendo en una reciente victima predilecta del hampa, cosa que no era así antes. Ahora tenemos casos emblemáticos como la madre del nadador venezolano Rafael Vidal asesinada en su casa por su propio jardinero, en el análisis de los casos encontramos un patrón y es que la mayoría de estas personas han sido asesinadas en sus casas, la mayoría vive sola, en lo mayoría de los casos hijos y nietos han migrado.

Adicionalmente hay otro elemento que es eso que llaman el nido vacío, que afecta a las personas mayores, sobre todo desde el punto de vista de la depresión. Las personas mayores tienden a caer mucho en depresión, primero por la soledad, además la vejez es un tema femenino, las mujeres viven más que los hombres, entonces muchas mujeres suelen enfrentar su vejez solas sin sus parejas, eso ya es un elemento que introduce cierta predisposición a la depresión, pero si a eso le sumas que se te van los hijos, los nietos, los sobrinos, entonces la depresión está ahí, está latente. Además en un país donde no hay antidepresivos, entonces eso hace que las personas tengan una doble vulneración, primero por la imposibilidad de vivir con su familia y sus afectos, motivado a un país que prácticamente obliga a la gente a que se marche y no tener acceso a medicamentos.

Convite hace monitoreo del acceso a medicamentos demandados por ese sector de la población ¿qué han encontrado?

Las personas mayores en un 70% sufren de hipertensión, de diabetes o de ambas, ese índice de desabastecimiento que medimos en cinco ciudades (Caracas, Porlamar, Maracaibo, Mérida y Barquisimeto) arrojó en octubre un desabastecimiento de 92% de medicamentos para hipertensión y 96% de desabastecimiento para diabetes. En Maracaibo notamos que hay un mejor abastecimiento, pero tiene que ver con por su situación fronteriza hay mucho tráfico de medicinas desde Colombia, pero el tema es a qué costo.  De pronto aquí en Caracas apareció el losartan pero está costando 160, 28 pastillas, para una gente que tiene una pensión de 220, prácticamente se te va el 70% de la pensión en una pastilla que no te dura ni el mes completo, porque trae 28. Hay un problema de escasez y alto costo inflacionario desde todo punto de vista, 220 mil no te alcanza para nada, a eso súmale que hay un millón de personas adultos mayores que están fuera de la seguridad social, eso quiere decir que hay un grupo importante que ni siquiera puede comprar los medicamentos y lamentablemente lo que nosotros hemos evidenciado es que las personas están sacrificando necesidades. Entre el comes o compras medicinas, siempre va a prevalecer el medio comer, entonces notamos que ha habido un repunte de ACV.

En sus estudios también encontraron que los adultos mayores se estén autoexcluyendo de sus grupos tradicionales de socialización como las casas de abuelo ¿Cómo se explica esto justo en un momento que se encuentra sin sus familias?

En un estudio que hicimos en 36 casas de abuelo en el estado Miranda, encontramos que un grupo importante de personas mayores dejaron de asistir a las casas de abuelo, nos costaba entender el por qué, sobre todo que allí se da almuerzo y, en las actuales circunstancias, que te den un almuerzo gratis es una gran ayuda, entonces indagamos las razones y pudimos constatar que un grupo importante manifestaba que le daba pena que lo vieran tan delgado, entonces por eso dejaron de asistir, habían perdido tanto peso que en medio de su pudor se abstuvieron de asistir. La verdad que me parece dramático que la gente empiece a ocultarse por la extrema delgadez que está exhibiendo y no quiere por pudor que los vean en esa condición.

¿Qué impacto considera usted que puede generar la migración en un país que vive un bono demográfico?

Se está yendo un grupo importante pero tampoco es masivo, es decir, la mayoría de la gente sigue aquí, pero la preocupación es que esa gente va a envejecer, ya tenemos gente de 55 para arriba que ya eso son viejos, pero hay un grupo importante que va a envejecer y tú eres en la vejez lo que logres capitalizar durante tu vida laboral. La pregunta es cómo va a envejecer esta gente si este país lo que le ofrece a los jóvenes es moto taxi, bachaqueo, empleos muy precarios, sin seguridad social, sin posibilidad de acceder a una vivienda, eso te tiene que poner a pensar en esa oleada de gente que va a envejecer en muy precarias condiciones, porque no lograste capitalizar nada, vives el día a día, es decir vives para comer y así voy, pedaleando la vida. Qué haces tú cuando llegue el momento que no puedes cargar el mismo peso que antes, empiezas a darte cuenta que comienzas a envejecer y comienzas a quedar fuera, rezagado del mercado laboral y si a eso le sumas que no tienes mayores capacidades y destrezas eres un prototipo ideal para ser una persona que viva exclusivamente de la ayuda del Estado.Venezuela está considerado el peor país para envejecer de la región según el Índice Global de Envejecimiento, Age Whatch.

Venezuela ocupa la posición 76 del índice Age Whatch, la segunda más baja en la región