(Caracas, 16.08.2018. Proiuris). Piquetes de la GNB impidieron la movilización desde el Hospital José Manuel de los Ríos hacia Miraflores. Solo pudieron entregar un documento con sus demandas a un representante de la Vicepresidencia Ejecutiva de la República.
Luego de 53 días de paro fueron recibidas por primera vez las exigencias del sector salud. Líderes sindicales concentrados en la avenida Vollmer de San Bernardino entregaron a un representante de la Vicepresidencia Ejecutiva de la República un documento en el que exhortan al presidente Nicolás Maduro a reajustar el sueldo mensual de acuerdo a lo establecido en la tabla salarial: 210 salarios mínimos.
Tres piquetes de la Policía Nacional Bolivariana acordonaron desde tempranas horas los accesos hacia San Bernardino y la Avenida Urdaneta para impedir la movilización de los trabajadores en conflicto hasta el palacio de Miraflores, sede de la Presidencia de la República. Sin embargo, la concentración, que trancó la avenida e impidió el tránsito vehicular, se mantuvo hasta las 12:30 pm.
Tres horas de protesta transcurrieron hasta que el vicepresidente de hospitales, Armando Marín, llegó la avenida Vollmer para dar una respuesta a la multitud que lo esperaba desde las 9:00 am a las puertas del Hospital José Manuel de los Ríos.
El funcionario, quien fue en representación del Ministerio de Salud, propuso a los dirigentes gremiales la creación de nuevas mesas de trabajo para solucionar el conflicto. Sin embargo, la propuesta fue descartada. “No nos negamos a la mesas de trabajo pero es el pueblo quien quiere una respuesta inmediata” indicó Ana Rosario Conteras, presidenta del Colegio de enfermeras de Caracas.
Marín estuvo rodeado de un cordón de seguridad. Mientras caminaba muchos de los presentes lo conminaban a cumplir las promesas de aumento de sueldo y cuestionaban al gobierno. Informó que se trasladarían dos funcionarios enviados por la vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, para recibir el documento dirigido al primer mandatario.
La multitud retenida en la avenida por los pelotones de la PNB, no se conformó con la presencia del viceministro Marín. A través de consignas como “Venga ministro, baje pa’que vea, que estas son las enfermeras que te van a ganar la pelea”, “Queremos la quincena de Tibisay Lucena”, exigieron la presencia de algún miembro del despacho de la presidencia. Pero a los dirigentes gremiales les notificaron vía telefónica que no había ningún funcionario disponible para atender a la petición.
A las 12:20 pm y luego de dos horas de espera, Miguel Carballo, director de Atención Ciudadana de la Vicepresidencia Ejecutiva de la República, recibió el petitorio a través de Pablo Zambrano, director ejecutivo de Fetrasalud: y Douglas León Natera, presidente de la Federación Médica Venezolana. Según declaraciones de los gremialistas, Carballo se comprometió a entregar al presidente Maduro el documento con las solicitudes de reivindicaciones para poner fin al conflicto.
Fanny Gamarra, presidenta de la Federación del Colegio de Enfermeras de Venezuela, explicó que las próximas acciones del sector salud dependerán de la respuesta del presidente Maduro hasta el 20 de agosto, cuando se tiene previsto un aumento de sueldo. “Nuestras acciones dependerán del nuevo decreto de reajuste salarial. La exigencia sigue sobre los 210 salarios mínimos”.
Indicó que la participación de los trabajadores en conflicto en el Congreso Nacional de la Salud, previsto para el 25 y 26 de agosto, dependerá también de la decisión del Ejecutivo. “De no tener las respuestas favorables que esperamos nos reuniremos el 21 agosto y tomaremos otra acciones”.
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